La "Oficina Antifrau de Catalunya" (OAC), dirigida por Daniel de Alfonso, va a acabar en escándalo. Cataluña eligió a un representante del ámbito jurídico para dirigir una Oficina perfectamente prescindible. Existiendo los demás órganos de control, parece absurdo inventarse otra Oficina. Ahora resulta que el Sr. de Alfonso se permitía charlas amenas con el sr.Ministro del Interior. De las conversaciones se desprende que cada uno buscaba petroleo en los campos del independentismo. Las conversaciones grabadas, pertenecen al año 2014. Al parecer en todo este tiempo, no ha habido suerte en esos campos para imputar a nadie. La respuesta condicionada al mejor estilo de los perros de Pavlov, ha sido que todo es un montaje, que ellos son las víctimas, que habría que detener al que a filtrado las grabaciones, etc. Los de siempre. Por supuesto, NO HABRÁ DIMENSIONES, de motu propio. ¿Por qué ahora? La respuesta de momento parece un misterio. ¿A quién benef