Los ecos de las manifestaciones siguen ocupando espacios estelares en la prensa. Los ecos, desgraciadamente, se los llevan los actos vandálicos. En el mundo del espectáculo en el que vivimos, nada mejor que llamar la atención a esos actos delictivos, que la manifestación de cientos de miles de personas protagonizaron contra los recortes del Estado del bienestar. A título de ejemplo, quisiera describir la participación de una manifestación en Sabadell. El lugar de encuentro era junto al Corte Inglés. Mucha gente, pensaba que todas los sindicatos se reunirían allí. Pero no, fue la primera sorpresa desagradable. El espacio lo ocupaba la CGT. Había mucha gente que no era de este sindicato. Nos dijeron que CCOO y UGT estaban en otros puntos de reunión. A medida que la gente se reunía se empezaron a corear consignas, tan gastadas, que parecía poco prometedor. Se descalificaron a los demás sindicatos, al parecer CGT veía como “enemigo objetivo”, no a los recortes del gobierno, sino a l